Neil LaBute, cineasta especializado durante la primera parte de su carrera en dramas de extrema crudeza como En compañía de hombres (1997), Amigos y vecinos (1998) y Por amor al arte (2003), empezó a derivar hacia el cine de género —debido probablemente a la discreta recepción de aquellos títulos— con el film de terror Wicker Man (2006), al que han seguido hace muy poco la comedia Death at a Funeral (remake de Un Funeral de Muerte que se estrena en abril de 2010) y el thriller Protegidos por su enemigo (2008).
Su nuevo proyecto sigue asimismo la senda del suspense. Se titula The Burnt Orange Heresy, y está basado en una novela de Charles Willeford, autor considerado un maestro en el retrato de monstruos humanos engendrados por un entorno desquiciado. Otras escritos de Willeford llevados al cine son Cockfighter (Monte Hellman, 1974) y Miami Blues (George Armitage, 1990).
En cuanto a The Burnt Orange Heresy, se ubica en Palm Beach y cuenta cómo un crítico de arte sin escrúpulos intenta concretar una entrevista con un pintor francés aislado del mundo desde hace décadas. La película será producida por el propio Neil LaBute junto a William Horberg (Cometas en el Cielo). Horberg y LaBute ya han colaborado en la citada Death at a Funeral.