Para los ingleses, Hadouken va a dejar de ser un neologismo popular japonés cuyo significado es ‘movimiento de puño ondulatorio’ asociado a acciones del juego de peleas por excelencia, el Street Fighter. Además de lo anteriormente citado, se trata de una nueva banda musical surgida de la corriente inglesa llamada “Voice of Young Britain 2008”. Son provocadores, arriesgan y hacen algo diferente en las islas. Se trata de una mezcla entre sonidos electrónicos, rock duro y rap.
Si hubieran nacido a principios de los años 90, diríamos que se han criado en la escuela del rap metal de los Korn, Faith No More o Helmet. Si hubiesen madurado en mitad de la misma década, se apoyarían en influencias electrónicas como The Prodigy, Crystal Method o Properllerheads. Todas hacen rap, sólo que los primeros con metal y los segundos con electrónica. La mezcla de estas tendencias, formarían el sonido de estos jóvenes ingleses con nombre de combo (“ración”) de puñetazos de videojuego: Hadouken!
Por momentos funky beats, otros más directos al indie y a ratos electrónicamente puros encomendados a protagonizar el cartel de una rave juvenil en un descampado perdido. Esa es la receta de la nueva ola que atraviesa Inglaterra con fuerza y que tiene grandes problemas de arrastrar con todo, incluso a los modernos de modas en las que impera el pop electrónico.
For the Masses, el segundo trabajo de estudio, invita a la violencia o, cuanto menos, incita a la creación de un single en el que el videoclip sea una muestra de cómo destrozar una casa, una discoteca o cualquier inmobiliario. Cada canción es más atronadora que la anterior y cargada de energía envolvente hasta el final.
Un total de diez canciones que no pierde ápice de su sentido desde el comienzo. Todo el disco se rige por un mismo código unidireccional, el de la fantasía y la recreación ambiental y eléctrico, adornado con frases directas, idiosincrasia del rap de toda la vida.
El tema Rebirth es directamente una amenaza a los franceses Justice, pues el sonido es casi plagiado al de Stress, incluido el del órgano que planta el tiempo. A partir de Turn the Lights Out, el disco gira en torno a la figura de The Prodigy y sus primeros LP´s. Maxim y Flint deberían estar preocupados, pues les acaban de salir unos competidores de primera línea en su propia tierra. M.A.D. y Evil son buena prueba de ello.
También hay tímidos relatos inspirados en el Rey del Pop, como House is Falling Down, que recuerda a la remezcla del Dirty Diana de Michael Jackson. Una buena ejecución, producción y elaboración la de este gran CD que marca el destino de dónde deben ir los tiros de la nueva oleada de grupos juveniles que intenten llevar algo novedoso en el sonido de las islas británicas.