Las espectativas que en su momento creó el primer trabajo de Burst, Prey On Life, parecen confirmarse con la edición de su nuevo álbum, un trabajo que destila paranoia hardcoriana a través de unas hirientes y cortantes guitarras, una voz de berridos desquiciantes y, sobre todo, una imaginativa batería de sugerente diversidad y recursos infinitos.

En medio de un contexto arrebatador, Origo contiene espacios puntuales de melodía que contrastan con repentinos cortes rítmicos, salpicados de intensas vocalizaciones de naturaleza esquizofrénica y unas guitarras de crudeza delirante cuyas turbulentas ondas desgarran acordes provocativos como ocurren en los casos de Sever o Slave Emotion.

Jonas Rydberg y Robert Reinholdz destacan como una dupleta de guitarristas imaginativos, a pesar de desarrollar sus coordenadas musicales hacian un estilo extremista que no permite demasiadas opciones.Sin embargo el ambiente de sus composiciones contiene el suficiente nivel como para no resultar demasiado básicos. Los abruptos y desenfrenados trallazos de incandescencia metálica se combinan con momentos de cierta ductilidad. El mayor ejemplo lo encontramos en It Comes Into View, corte totalmente distinto al resto, con una atmósfera de connotaciones psicodélicas, encuadrado en un ritmo muy experimental.

La voz de Linus Jägerskog es otra de las señas de identidad por su perfil extremo, quizá demasiado, para una banda que puede encontrar una mayor efectividad disminuyendo la virulencia para resultar más accesibles y menos abogiantes en el aspecto vocal.

Y como punto indispenable a la creatividad del grupo, es inevitable mencionar el atractivo protagonismo de Patrik Hultin, un bateria alejado de convencionalismos, cuya efectividad incide positivamente en la perspectiva estructural de las composiciones.

Como dato curioso, Mercy Liberation tiene un enfoque inicial que recuerda a la música habitual de los espaguetti western; por otra parte, uno de los mejores cortes del álbum, con protagonismo de efervescentes guitarras y, sobre todo, de una genial batería.

Con Origo, Burst han elevado su nivel. Se nota que hay un compromiso y un esfuerzo de superación. Sin renegar de la rudeza, han realizado un acercamiento hacia armonías sugerentes.

Un álbum de crudeza extrema, con un perfil metalcore, que deja espacios para sonidos menos agresivos.