Si una cosa ha demostrado Sony a lo largo de la historia, es su tenacidad. Se obcecó en un soporte propio, y ni los fracasos de Beta, Minidisc o el UMD de PSP les impidieron seguir dándolo todo hasta que el Blu Ray ganó la partida. Algo parecido puede pensarse que les sucede con su proyecto de red digital: quieren darlo todo y aglutinar todos sus servicios. Pero de momento no les ha ido bien.
A la nueva acometida -la iniciativa no es ni mucho menos nueva- le ayudaría el poder que Playstation 3 ha ido ganando y la importancia de su catálogo de videojuegos, así como la renovación de todo su software para lo que han contado con la experiencia, nuevamente, alrededor de los desarrolladores para Playstation. Pero como decíamos, no es la primera vez que intentan algo parecido, y hasta el momento el resultado ha sido decepcionante.
Probablemente, el primer golpe en esta tendencia fuera la debilidad de su propuesta frente a la del iTunes de Apple. Sin posibilidad de darle una firme sucesión mp3 al Walkman, Apple les ganó terreno y demostraron una forma de hacer las cosas mucho más hábil y efectiva. Ahora, no obstante, quieren unir desde su división de cómics, hasta su catálogo de películas, e-books y hacer más rentable la unión de su software y su hardware. Lo harían todo tomando como base la Playstation Network y aprovechando que sus esfuerzos en hardware están dando resultados que les permiten centrarse en el soft. La diferencia con la situación de diez años atrás, cuando sus primeros proyectos fracasaron, es según los directivos de la compañía que "las distintas partes de Sony no se hablaban, [...] ahora ya no hay silos".