Ciudadanos equilibrados en sus aficiones y que hayan dormido bien por las noches. Eso parece pretender el gobierno de Corea del Sur, que mientras otros (Alemania, Venezuela, Australia...) siguen incentivando las medidas de censura a los videojuegos violentos, se muestra muy preocupado por la desbordante adicción de muchos de sus ciudadanos a los videojuegos.
La medida que se anuncia en varios medios es un "toque de queda" para algunos de los juegos más seguidos, que vendrían a representar el 79% del mercado con nombres tan desconocidos para nosotros como "Barameui Nara and Mabinogi". Restricciones durante 6 horas nocturnas, drásticas reducciones del ancho de banda tras una prolongada sesión y sistemas para prevenir que los menores usen identificadores de sus padres, son parte de las medidas adoptadas.
La sorprendente regulación llega tras varios casos extremos de adicción que fueron publicados en los medios y conmocionaron a la sociedad sudcoreana, y que incluyen el de una pareja que dejó morir a su hija de 3 meses de inanición por estar demasiado ocupados con sus partidas en red.