Ron Gilbert, artífice del mítico Monkey Island, tiene listo su nuevo videojuego, DeathSpank. Con rasgos fieles a su filosofía de intercalar una nueva historia con humor y diseños carismáticos, su juego -dotado de un estilo similar al de Diablo, una de las pasiones de Gilbert junto a Zelda- está en la fase final de pruebas y él está preparándose ya para la campaña de prensa que llevará de la mano de Electronic Arts (editora del juego).
Tras dos años en que el concepto inicial varió sustancialmente puesto que su idea era la de hacer un juego "episódico" que ir desarrollando progresivamente -algo que finalmente fue descartado una vez empezó su producción-, Gilbert afirma que su objetivo de hacer el juego "más asombroso jamás realizado y ganar con él el premio Nobel" está holgadamente cumplido, y siguiendo con el tono de sorna cita a su "héroe" (sarcasmo mediante) George Bush para afirmar "misión cumplida".
A lo largo de los próximos meses cabe esperar que la promoción de DeathSpank se vaya recrudeciendo y que tirando de la fama de su creador éste reciba la atención que él merece. Posteriormente veremos si los cambios en el mercado del videojuego (tras más de quince años del lanzamiento del segundo Monkey Island) le han afectado o si por el contrario ha sabido adaptarse y publicar un título que se haga un hueco en un sector saturado en el que las apuestas diferentes no siempre son bien entendidas.