La conexión permanente puede ser uno de los temas más debatidos a propósito de Xbox One. La historia de cómo Microsoft trató de imponerla y tuvo que dar marcha atrás ante las virulentas críticas, constituye un episodio único en la evolución del videojuego... y en los errores calamitosos, en este caso afortunadamente resueltos.
Pues bien, en EA tienen claro que la conectividad permanente es algo que quieren para todos sus juegos, como el modelo free-to-play para desarrollarla. "La posibilidad de interaccionar con Battlefield y FIFA de manera gratuita tiene que ser parte de cualquier gran franquicia que hagamos ahora", explica Peter Moore. "Independientemente de cuánto dinero tengas en la cartera, cuánto tiempo quieras dedicarle y con qué soporte estés jugando", añade.
Su nueva filosofía se resume en un "no vamos a empaquetar un juego que sea off-line, sencillamente no va a pasar". Una afirmación contundente que remarca al explicar que "y los jugadores quieren estar siempre conectados para almacenar sus logros o disfrutar de una experiencia multijugador plena. No vamos a dar experiencias offline".
Como algunos subrayan en la red, la forma de implementarlo será clave: en Mass Effect 3, por ejemplo, era un incentivo que no penalizaba al jugador novato. Pero forzar a los usuarios a algo sin más puede dar lugar a una desbandada indudable.