Cuando Keiji Inafune estableció distintas metas en la kickstarter que iba a servir para financiar Mighty No.9, probablemente no pensó que cumpliría con algunas en un espacio de tiempo tan reducido. Si el objetivo mínimo era de 900.000 dólares para las entregas para ordenador, el avance pronto permitió apuntar a Playstation 3, Xbox 360, Wii U...
Ahora, no obstante, Inafune ha ampliado su oferta y apunta más alto: si llega a los 3,3 millones de dólares, dará el salto a Xbox One y Playstation 4. Una cantidad importante que probablemente se encuentre con más problemas que las anteriores. Por un lado, por su tamaño como inversión, que probablemente tenga mucho que ver con el hecho de que no está familiarizado con las nuevas consolas, lo cual implicaría esfuerzos extra. Por otro, es más que posible que el grueso de los potenciales inversores ya hayan concretado sus inversiones y no haya mucho más margen. Finalmente, cabe plantearse cómo un juego bidimensional de estética Mega Man va a sacar partido a las nuevas consolas sin modificar su proyecto, algo que a buen seguro tienen en cuenta quienes quieran poner su dinero en la causa.
En todo caso la respuesta es de los usuarios. Estos decidirán con su apoyo si la conversión alcanza o no a la nueva generación.