Con un negocio que le debe mucho a la exportación, en Nintendo están realmente inquietos por las fluctuaciones del mercado financiero. Algo comprensible cuando han de centrarse en posibles riesgos ante unos balances que hasta ahora son muy positivos, y cuando el próximo producto que tienen entre manos -3DS- no hace sino ganarse elogios de la práctica totalidad de las compañías.
"El Euro es solo uno de los ejemplos de un tema que hemos estado observando en el mercado de divisas desde el shock de Lehman Brothers", advierte Iwata al respecto. En su opinión, el gobierno de Japón debería hacer más por controlar las fluctuaciones, que afectan seriamente a la distribución y ventas especialmente cuando el precio de sus productos ha de mantenerse constante (y siendo la tercera compañía japonesa, sus declaraciones tienen su peso).
Preguntado sobre Wii y su reemplazo (no en vano en lugares como el Reino Unido la bajada de ventas es clara), su respuesta apunta a que lógicamente trabajan en algo "cuando lanzamos al mercado un nuevo hardware, empezamos a trabajar en el siguiente, y en ese sentido Wii no es una excepción". ¿Momento en que verá la luz? "Cuando nos quedamos sin ideas para el hardware actual, y no podemos dar nuevas sorpresas relevantes con él, entonces damos el salto".