Las cartas, uno de los elementos con los que Nintendo comenzó a forjar su historia —antes de su introducción en el mercado del videojuego— acabarán teniendo un papel en la estrategia de la compañía para vender figuras ligadas a sus videojuegos.
Hablamos de la división en la que se van a incorporar a las figuras Amiibo, un hábil cruce de merchandising y extras para videojuegos que tira de planteamientos previos como Skylanders o Disney Infinity, pero que Nintendo ha querido integrar con mayor plenitud y haciendo que las figuras no sean su único recurso.
La estrategia parece claramente definida: las primeras figuras ya pueden ser reservadas, con lanzamiento el 21 de noviembre junto a Super Smash Bros. Inicialmente serán compatibles con Hyrule Warriors, recibiendo posteriormente soporte Mario Kart 8. A partir de ahí, no solo es que otros juegos puedan irse integrando en el sistema: Nintendo prevé poner a la venta figuras de un coste más reducido, o para hacerlo más económico todavía, cartas para el lector NFC: “No puedo discutir los detalles todavía, pero Amiboo tiene el potencial de proponer nuevas formas de jugar a las cartas”, explicó Miyamoto en una reunión con inversores en la que estuvo acompañado de Satoru Iwata. “Habrá más figuras, más pequeñas e incluso más baratas en el futuro”, añadió en relación a lo antes expuesto.