Si al agotamiento inevitable de la moda más reciente del videojuego, la de Guitar Hero, en Activision reaccionaron con un cierre tan fulminante como pragmático y con una oleada de anuncios (incluendo nuevo Spiderman, X-Men e incluso un juego para Family Guy) ahora salta la liebre en forma de rumor-terremoto: podrían estar planeando la adquisición de Take Two.
El movimiento, siendo sorprendente, no es la primera vez que aparece en los últimos años en cuanto a T2, si bien anteriormente había sido Electronic Arts la que había protagonizado un largo culebrón que acabó mal: al poco tiempo de frustrarse la operación llegaron los problemas económicos para EA, y acabó tan debilitada que más bien podía haber sido Take Two la que adquiriese al antes gigante norteamericano.
Aún así, la situación de Activision en estos momentos es muy diferente por privilegiada: entre sus franquicias de enorme rentabilidad destaca de forma única Call of Duty, un título cuya explotación anual sigue dando enormes rendimientos ante los intentos de la competencia por seguir su estela (por el momento, sin éxito).
Curiosamente, no hace demasiado tiempo se especuló con que Grand Theft Auto podría seguir los pasos de Call of Duty de cara a publicarse anualmente y poder así sacar todo el rendimiento económico a su franquicia. Take 2 descartó esa posibilidad porque consideraban que no daría tiempo ni a implementar las suficientes mejoras ni a dar con un título de suficiente atractivo cada año. Algo que podría cambiar drásticamente si Activision, experta en explotar hasta los límites las marcas bajo su dominio, se hace con las riendas de la compañía.