Satoru Iwata dio el primer movimiento en cuanto a la oficialidad de la sucesión de Wii (también llamada 'Project Cafe'), y poco después de que los departamentos de prensa decidieran elevar sus revelaciones a la categoría de nota de prensa con fechas concretas, vuelve a tomar el relevo para seguir generando expectación: Wii 2 quiere volver a ser una consola revolucionaria.
Así, según declaraciones realizadas en un nuevo acto de prensa, Iwata, que trata de ser contenido en todo momento, explica cómo con la nueva consola van a cambiar nuevamente la forma de jugar en las casas, algo que choca con otras recientes declaraciones en que pronosticaba una larga vida a los mandos tradicionales. Además, ante las crecientes sospechas de la prensa de que el nuevo controlador vendría con una minipantalla incorporada, Iwata no ha querido ni confirmar ni desmentir, pero se reafirma en la idea de que lo mejor será que la gente lo vea por sus propios ojos en la próxima presentación en el E3.
Por otro lado, en lo que se refiere a su más reciente consola, la Nintendo 3DS, las ventas han quedado por debajo de las previsiones de Nintendo (pronosticaban 4 millones de unidades y se han quedado en 3.61), en algo que el propio Iwata ha explicado: los efectos demoledores del terremoto y posterior tsunami han hecho mella en las ventas, además de pronosticar que los títulos que quedan por venir serán el espaldarazo definitivo para lograr cifras de vértigo en los próximos balances.