El juego tiene una dinámica de juego muy repetitiva y sencilla que puede resultar muy monótona para el jugador. A pesar de que cada personaje presenta golpes distintos, casi todos ellos se rigen por los mismos botones y combos. El sistema de lucha resulta muy cansino. A la larga, el jugador se pasa la partida apretando dos o tres botones a la vez sin pensar demasiado en el modo de afrontar las luchas.
En ese sentido se echan de menos más variedad de golpes y de combos, o algún modo de lucha más personalizado en momentos específicos (como con las luchas con los capitanes del Orochi army). La concepción de las fases en el modo historia es muy reiterativa y lineal, casi siempre te viene marcado el camino a seguir, con lo que tu función se reduce a aniquilar todo aquel que te pase por delante.
No obstante, sí aporta algunos detalles que ayudan a mejorar su jugabilidad. Una de ellas, es la opción de escoger tres personajes por campaña, lo que te permite, desde un prisma más estratégico, cambiar de personaje en medio de la partida. Por otro lado están los rasgos propios de los RPG como subida de niveles, aprendizaje de habilidades y obtención de armas. También es apreciable la posibilidad de desplazarnos por el escenario a los lomos de un caballo.
Uno de los apartados más flojos de la nueva entrega Warriors es su apartado sonoro. La música techno, que en momentos roza el trance, y que acompaña al jugador durante el juego y las escenas cinemáticas, no ayuda demasiado a situarte en el contexto histórico, ni tampoco, (puede que ese fuera el objetivo) a sumergirse en el frenesí de las batallas multitudinarias. Repetitiva y machacona, la música hace aumentar la sensación de estar jugando una y otra vez a lo mismo durante las diferentes fases.
Warriors Orochi presenta alicientes, pero en su conjunto muestra cierto agotamiento en la propuesta. En especial por su jugabilidad monótona y cansina, y por la falta de más modos de juegos (aparte del modo historia, tan sólo hay un free mode y el on line) . Tras completar las primeras fases uno ya tiene la sensación de que no le va a ofrecer muchas novedades más, y eso va mucho en su contra a pesar de tener gráficos aceptables y un modo on line entretenido. En definitiva un título que tan sólo los muy fanáticos a los Beat’Em Up podrán disfrutar. Y enhorabuena por ellos, ya que la escasez de títulos de este género para PC es significativa.