Cuando todo el mundo daba por acabada la carrera de Tom Cruise, con ese odio por una figura pública que solo Internet puede alimentar, el éxito sin paliativos de Misión: Imposible – Protocolo Fantasma (la entrega más taquillera de la franquicia de espionaje) ha hecho de él nuevamente un valor seguro.
En su agenda aguardan All You Need Is Kill, Top Gun 2, Oblivion, El Presidente, Van Helsing, A Star Is Born y Misión: Imposible 5. Pero a ellas hay que añadir ahora Los Siete Magníficos, nueva versión del western dirigido en 1960 por John Sturges y protagonizado entre otros por Horst Buchholz, Yul Brynner y James Coburn (en la imagen). Recordemos que el film de Sturges era a su vez un remake de Los Siete Samurais (1954), cinta de Akira Kurosawa, de la que también se prepara ahora mismo otra versión.
Cruise siempre había deseado protagonizar una película del Oeste (fue la primera opción para interpretar el papel que finalmente le arrebató Russell Crowe en otro remake, El tren de las 3:10), y Los Siete Magníficos le permite además practicar la misma estrategia que en Protocolo Fantasma: es decir, rodearse de más estrellas —aún por determinar— para evitar que su nombre quede expuesto en solitario al dictamen de la taquilla. Recordemos que Los Siete Magníficos es la historia coral de un grupo de mercenarios contratados por los habitantes de un pueblo mejicano para que les libren de un clan criminal que está expoliando sus escasos bienes.