La Realidad Virtual, futuro inevitable del videojuego.
Es cuestión de tiempo, solo que los últimos movimientos pueden haber precipitado acontecimientos: la presentación por parte de Sony de Morpheus y la adquisición por parte de Facebook de Oculus Rift han supuesto un cambio en el mercado que puede haber impuesto una reacción a Microsoft.
De esta forma, la compañía habría invertido hasta 150 millones de dólares en la adquisición de ‘activos’ vinculados a la realidad aumentada, algo de lo que informan en Tech Crunch donde detallan un acuerdo de distribución con Osterhout Design Group, especializados a su vez en “periféricos de realidad aumentada vestibles”.
Todavía se desconocen las implicaciones exactas de la adquisición, el tipo de reacción que imponen sus patentes frente a los sistemas antes mencionados. Recientemente tuvimos noticias de la propia Microsoft en que explicaban que de la misma forma que habían pergeñado sistemas como Kinect, tenían su propia agenda para la realidad virtual (falta por ver si lo antes descrito se incorporaría a su propio sistema).
Un E3 por todo lo alto
Paralelamente, en Microsoft y por boca de Phil Spencer -en una entrevista a Polygon- se han comprometido a que la próxima feria del E3 el catálogo de la compañía luzca por todo lo alto. De hecho promete “la mejor alineación de títulos en mucho tiempo”, si bien se muestra reticente a dar nombres todavía.
Además, Spencer se muestra entusiasmado con la actual nueva generación, explicando que “seis meses atrás, todos se preguntaban si los juegos para consolas estaban muertos… estamos ante una larga generación con muchos años por delante y mi creencia esencial es que los grandes juegos hacen grandes plataformas”.