Las manoscritica de cine El padre Mario Pantaleo es esperado por decenas de personas cada día para recibir su curativa imposición de manos. Lejos de ufanarse de ello, el padre asegura que él no hace nada, que todo es cosa de Dios. Tal afirmación no es bien recibida por las autoridades eclesiásticas que la ven como un acto de soberbia y deciden desterrarlo.
09/04/2009